ADICCIÓN COCAÍNA
De todas las drogas populares y consumidas, la que peor pronóstico tiene sin lugar a dudas es la cocaína, con una tasa de recaída superior al 85% y con una problemática derivada sencillamente devastadora, suelo repetir en mi consulta "casa donde entra la cocaína, casa que destroza" y si además va de la mano con otra adicción el tratamiento se obstaculiza bastante.
La cocaína se extrae de una planta denominada coca y que actúa como estimulante del sistema nervioso central, determinando un exceso de euforia que dura en quince y treinta minutos.
Tiene un gran poder adictivo y en muy poco tiempo puede ocasionar un deterioro rápido de la salud. Actúa como simpaticocomimético, provocando una avalancha de dopamina y noradrenalina en el cerebro. En algunos casos provoca un estado de confusión que conduce a la aparición de alucinaciones y a la alteración de las sensaciones táctiles.
Como su acción local de vasoconstrictor es la causante de la destrucción de la mucosa nasal, por eso los cocainómanos suelen estar rascándose la nariz o cuando se la suenan sangran, ¿conoces a algún cocainómano y no sabías este aspecto tan curioso? Esos picores tan misteriosos...
¿Y cómo se genera la adicción? Nuestro cerebro segrega dopamina, un neurotransmisor que provoca sensación de placer cuando comemos, hacemos el amor, practicamos ejercicio... Se trata de un mecanismo compensatorio para que nos guste realizar actividades positivas para la supervivencia, la reproducción de la especie o la salud. La cocaína también dispara los niveles de dopamina, pero mucho más, de manera que el cerebro tiene que trastocar su sistema de recompensas naturales. Esta alteración causa una dependencia, malestar, enfermedades...
En la terapia será importante que el paciente acepte la dificultad que presenta en el manejo de esta sustancia y que no existen "dosis mínimas", o "he consumido sólo lo justo", porque es muy típico en consulta que el paciente entre sesión y sesión consumió "un poquito" y que no pasa nada. Establecer y mantener una abstinencia total será el objetivo final.
De la mano con este problema va el despilfarro económico, las personas que consumen cocaína gastan cantidades indecentes de dinero en esta droga, llegando incluso a robar o a vender objetos de valor.
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