El fascinante mundo de los sueños forma parte de nuestras vidas, por las noches en esa pausa que tenemos para descansar de un día agotador, cerramos los ojos y aparecemos poco a poco en el mundo onírico donde no existen normas rígidas, la magia abunda y todo puede ser posible... Tener aquello que deseamos, poder volar, viajar hasta el último rincón habido y por haber, volver al pasado o avanzar al futuro, volver a ver a esa persona que nuestro corazón late por ver...
Dormir es imprescindible, de hecho pasamos un tercio de nuestras vidas durmiendo, es una necesidad biológica en la que se restablecen las funciones psíquicas y fisiológicas para encontrarnos bien durante el día y preservar una salud adecuada, los psicólogos consideramos que es importante para consolidar la información que procesamos durante el día, por lo tanto se consolida el aprendizaje.
Los científicos explican que durante los sueños reconstruimos una dimensión a partir de la información que tenemos almacenada en nuestra memoria, hay personas que tienen facilidad para recordar lo que sueñan, mientras que para otras es realmente difícil.
Desde la antigüedad se le ha dado importancia a los sueños, ya en la antigua Mesopotamia eran escritos en piedra, en la antigua Grecia los sueños eran considerados como manifestaciones divinas...
La interpretación de los sueños no tiene por qué ir ligada a esoterismo, ya Freud en 1899 escribió el libro "la interpretación de los sueños", donde explicaba que cuando dormimos se revelan muchos datos sobre nuestras preocupaciones, deseos y apetitos reprimidos. Para Freud los sueños de los niños eran manifestaciones del día anterior, pero en los adultos es algo más complejo, hay un "contenido latente" que no debe ser subestimado. Para el psiquiatra Jung los sueños tienen una sabiduría intrínseca, simbolizan nuestra experiencia vital.
Una práctica frecuente es hacer un "diario de sueños", consistente es escribir lo que se ha soñado, se ha de escribir lo que se ha soñado cuanto antes despertemos, pues normalmente a los pocos minutos de desvelarnos empezamos a olvidar lo que hemos soñado, conforme pasan los minutos se desdibuja más y más... En el diario, se escribe la fecha del día en el cual vamos a dormir, escribiendo lo más relevante que ha sucedido en ese día y las personas con las cuales hemos estado, al despertar al día siguiente se narra el sueño, las escenas, sentimientos, con todos los detalles posibles... Conforme pasen los días y examinemos en nuestro diario lo que estamos soñando, podemos observar inequívocamente aquellas emociones y asuntos que no hemos podido solventar por alguna razón, así como nuestros anhelos más inconscientes, pudiendo dar lugar a conocernos más a nosotros mismos.
Bajo mi punto de vista, hay que prestar especial atención a aquellos sueños que se repiten mucho, pues pueden albergar un mensaje que normalmente cuando es interpretado se esfuma.
Te recomiendo la película "Origen" (2010) es de mis películas favoritas y trata sobre construir realidades alternativas mediante los sueños, con Leonardo DiCaprio (Cobb) como protagonista. Existen multitud de libros que pueden ayudarte a interpretar tus sueños, desde diferentes técnicas a diccionarios de sueños y te obsequio un libro sencillo de leer y muy entretenido, del astrólogo francés Didier Colin para que puedes profundizar en este entretenido mundo: